Los créditos de consumo o préstamos personales son un tipo de préstamos otorgados por entidades bancarias o por establecimientos de compra, como tiendas departamentales, que sirven para adquirir bienes o servicios para el consumo personal con pagos a plazos.
Si has usado un crédito de este tipo y estás deseando comprar una casa por medio de una hipoteca, seguro te habrás preguntado si es posible solicitar y mantener ambos financiamientos.
La respuesta rápida es SÍ, pero a continuación, te decimos cómo se puede pedir una hipoteca teniendo un préstamo personal y te brindamos algunos consejos para no sufrir con los pagos mensuales o tener algún tipo de complicación.
La respuesta dependerá en gran medida de tu capacidad de pago. Para las instituciones financieras, el historial crediticio es una de las principales herramientas a utilizar para evaluar si eres apto o no para mantener varios créditos al mismo tiempo.
Al ver que te encuentras pagando otros préstamos, querrán saber si estás al corriente con los pagos y si tus ingresos son suficientes para cubrir el monto de tu deuda actual y futura.
En algunos casos, es posible que al pedir una hipoteca teniendo un préstamo personal, te rechacen la solicitud porque la institución financiera considera que el préstamo que requieres excede tu capacidad de pago.
Para evitar que esto suceda, deberás mantenerte al corriente con el pago de tu crédito de consumo, contar con un buen historial crediticio y ser capaz de demostrar una capacidad de endeudamiento mayor.
Si piensas pedir una hipoteca teniendo un préstamo personal, antes de elegir alguna, es importante que conozcas las diferentes opciones de hipoteca a las que puedes acceder.
Ya sea que solicites asesoría de un broker hipotecario o decidas buscar información por tu cuenta, asegúrate de comparar las tasas de interés, plazos de pagos y otras condiciones de crédito que ofrecen las distintas instituciones financieras.
Al comparar las opciones existentes te será más fácil elegir la mejor tasa de crédito hipotecario para tu préstamo.
Siempre que se adquiere un crédito, sea del tipo que sea, se debe firmar un contrato en el que se aceptan ciertas obligaciones y responsabilidades.
Uno de los errores que se cometen con mayor frecuencia es firmar dicho contrato sin leerlo en su totalidad o sin comprender las condiciones impuestas.
Nunca firmes un documento que no has leído o comprendido en su totalidad.
Si los términos legales y financieros se te complican, es importante que busques la asesoría de un agente de bienes raíces o un broker hipotecario, estos profesionales te orientarán durante todo el proceso para la compra de una casa utilizando un crédito hipotecario.
Lo mejor es preguntar todas las dudas que surjan durante el proceso de obtención de crédito para evitar problemas a largo plazo.
Si hay alguna condición o característica del crédito hipotecario que has solicitado que no te ha quedado clara, pide una explicación detallada a la entidad que lo otorga. No dudes en preguntar todo lo necesario.
A pesar de que se puede pedir una hipoteca teniendo un préstamo personal, antes de hacerlo es importante que evalúes tu situación financiera para asegurarte de que cuentas con la capacidad de pago para solventar ambos créditos.
Suma todos tus gastos diarios, incluyendo el pago del crédito de consumo, para saber qué parte de tus ingresos quedan libres para ser destinados al pago de una hipoteca.
Mientras más organizadas se encuentren tus finanzas, enfrentarás menos problemas de pago.
Si cuentas con un crédito de consumo, procura no utilizarlo para realizar gastos que no son de extrema urgencia.
La adquisición de deudas innecesarias puede hacerte entrar en un callejón sin salida al sumarse al pago de otros créditos, ya que los préstamos de consumo suelen tener intereses altos que hacen que al final pagues mucho más por aquello que no necesitabas.
Una vez conseguido el crédito hipotecario, ten en mente las fechas de pago de ambos créditos, esto te ayudará a no caer en incumplimientos, ya que esto se verá reflejado en tu historial crediticio y podría ocasionar que en un futuro te sea más difícil solicitar cualquier tipo de financiamiento.
Ahora que ya sabes que se puede pedir una hipoteca teniendo un préstamo personal, pon manos a la obra de manera responsable. Acércate a un asesor hipotecario de Credimejora para encontrar el crédito que más te convenga y se adecúe mejor a tus necesidades.