Contratar una hipoteca con personas cercanas a ti, como puede ser tu pareja o familia, hace que el peso de un compromiso financiero de esta magnitud sea mucho más llevadero al compartir no solo la felicidad de estar alcanzando una meta conjunta, sino también las responsabilidades que se derivan.
Además de que las mensualidades que cada uno deberá solventar serán mucho menores, el presupuesto que podrían alcanzar al unir fuerzas será mucho más alto.
Si estás interesado en beneficiarte de esta unión de hipoteca, te invitamos a seguir leyendo para conocer los tipos de créditos hipotecarios que se pueden juntar entre familiares, amigos o parejas, incluso sin tener que estar casado legalmente.
Créditos mancomunados en bancas comerciales
Unamos créditos
Créditos mancomunados FOVISSSTE
Algunas bancas comerciales, como BBVA, ofrecen esquemas de financiamiento que permiten sumar tu crédito hipotecario con el de un familiar directo.
El único aspecto que deberás considerar al momento de contratar la hipoteca es que, quien tenga los mayores ingresos de las partes involucradas será reconocido como el acreditado principal, mientras que la otra persona será coacreditada.
La idea de este tipo de crédito hipotecario es llegar a un acuerdo en el que ambas partes contribuyan con sus ingresos de acuerdo con sus posibilidades económicas para que al finalizar de pagar, ambos sean dueños del inmueble adquirido y gocen de los mismos beneficios.
Respecto a los requisitos para solicitar un crédito mancomunado en la banca, estos son muy similares a los requisitos de un crédito hipotecario individual.
Ya que, ambas partes tendrán que entregar documentos como identificación oficial (que además sirve para comprobar el parentesco), comprobante de ingresos, comprobante de domicilio y contar con un buen historial crediticio.
Si no quieres acudir a bancos comerciales, entonces te conviene conocer el programa Unamos Créditos, un nuevo esquema de financiamiento de Infonavit que permite juntar créditos con algún familiar, pudiendo ser padres, hijos o hermanos, o con algún ser querido que no tenga relación directa contigo, es decir, entre parejas que no estén legalmente casadas o amigos cercanos.
Este tipo de crédito hipotecario permite obtener un mejor financiamiento para comprar una casa nueva o usada de mayor valor, con una tasa de interés baja.
Al finalizar el pago del crédito, ambas partes involucradas tendrán el mismo derecho sobre la propiedad, dividido en partes proporcionales, por lo que es conveniente que hagas equipo con alguien de confianza.
Los únicos requisitos que deberán cumplir para contratar la hipoteca son que ambas personas sean derechohabientes del Instituto, mantengan una relación laboral estable y tengan mínimo 116 puntos INFONAVIT acumulados.
Existen varios tipos de créditos hipotecarios del FOVISSSTE entre los que se encuentra el crédito conyugal, si bien la desventaja es que para contratar una hipoteca de este tipo es requerido contar con un acta de matrimonio, uno de los principales beneficios es que puedes unir créditos incluso si tu cónyuge no cotiza para la misma institución sino para el INFONAVIT, ampliando tus posibilidades.
Además, tienes la oportunidad de juntar crédito con tu pareja y al mismo tiempo contar con el apoyo de la banca comercial para extender todavía más tu capacidad de compra gracias al programa FOVISSSTE para todos.
Por si fuera poco, aquellos que sean familiares directos y cuenten con un esquema tradicional también tendrán derecho a mancomunar créditos para la compra de un mismo inmueble bajo la modalidad FOVISSSTE-INFONAVIT Familiar.
Sin embargo, cabe mencionar que solamente pueden participar dos integrantes de la familia en la unión de dicho financiamiento.
Ahora que conoces los diferentes tipos de créditos hipotecarios, el siguiente paso es realizar tu precalificación con ayuda de herramientas como el precalificador de Credimejora para conocer el monto aproximado de crédito que puedes conseguir.
Hacerlo te tomará menos de 3 minutos, así que ¡no esperes más para comenzar el proceso!